¿Qué creemos?

Creemos en un sólo y único Dios, que es Trino (tres personas) en su esencia revelado como Padre, Hijo y Espíritu Santo. Desempeñando distintas funciones que armonizan en la gran obra de redención. Existe desde antes de la creación, es creador del Universo, omnipotente, omnisciente, omnipresente, inmutable, todopoderoso. Único Dios digno de adoración.

Creemos en el Padre como Dios eterno. Tanto amó a la humanidad que dio a su hijo Jesucristo como salvador del mundo. Dio al Espíritu Santo para convencer de pecado a los hombres y habitar en los creyentes. Dio su Palabra, La Biblia, como única expresión de su voluntad. Solo a Él debemos elevar nuestras oraciones.

Creemos en Jesucristo el Hijo como Dios eterno. Nacido de la Virgen María, concebido por el Espíritu Santo. En Él coexisten las perfectas naturalezas divina y humana, aunque sin pecado. Su sacrificio en la cruz es el único y suficiente medio de redención del hombre, es decir, perdón de pecados y vida eterna. Habiendo resucitado de la muerte al tercer día, ascendió al cielo. Es mediador ante el Padre para los pecadores e intercesor para los creyentes. Volverá por segunda vez a la tierra como Rey de Reyes y Señor de Señores a establecer su reino mesiánico milenial para finalmente y al término de ésta, juzgar a toda la humanidad.

Creemos en el Espíritu Santo como Dios Eterno. Está siempre activo en la vida de la Iglesia, convenciendo al mundo de pecado, justicia y juicio, regenerando a cada persona que pone su fe en Jesucristo, produciendo el milagro de hacerla una nueva persona. Bautizándola y repartiendo dones, es decir, capacidades divinas para la edificación de cada miembro de la familia de Dios.

Creemos en La Biblia escrita por hombres de Dios inspirados por el Espíritu Santo. Es escritura perfecta por lo tanto no se le debe quitar, añadir o modificar nada. Es la Palabra de Dios, única forma de fe y práctica cristiana.

Creemos que el hombre fue creado por Dios a su imagen y semejanza para su gloria. Esto incluye la capacidad de escoger entre el bien y el mal, tiene libre albedrío, siendo por ello moral y espiritualmente responsable.

Creemos que por Adán, el primer hombre creado, entró el pecado y como consecuencia todos somos pecadores y su resultado es la muerte. Tiene la oportunidad de reconciliarse con Dios creyendo en la obra de redención de Jesucristo, por lo que obtiene vida abundante aquí y vida eterna después de la muerte.

Creemos que la salvación del hombre es por gracia y no por obras. Se obtiene por arrepentimiento y confesión de los pecados a Dios, creyendo en Jesús como su Salvador y Señor. La salvación es la justificación ante Dios y la regeneración es el nuevo nacimiento espiritual, para así obtener la vida eterna en su gloria.
Creemos en la existencia del Cielo como un lugar donde habita la Trinidad, sus Santos Ángeles, y es la morada eterna de los redimidos por la sangre de Jesucristo.

Creemos en la existencia personal del diablo (satanás), su obra permanente es oponerse a Dios, mediante la transgresión a la Ley de Dios. Hacer caer en pecado al hombre y por engaños llevar a las almas a la perdición Eterna.

Creemos en la existencia del infierno como lugar o estado eterno, preparado para el diablo, sus ángeles, y todos aquellos que rechazaron a la persona de Jesucristo.